Carlos Ortiz
Querido hermano desdé que partiste no he podido dejar de recordar los años de nuestra niñez donde todas las travesuras y locuras las hacíamos juntos dándole lata a nuestros padres. Tú siempre supiste protegernos, darnos consejos y ya todos adultos estuvo esa mano amiga para ayudarnos cada vez que lo necesitaramos. Especialmente yo te agradezco que en los momentos más negros de mí vida estuviste ahí apoyandome, me fuiste a visitar cuando más sólo me sentía, al verte ahí dándome tú apoyo incondicional es algo que nunca voy a olvidar y dejar de agradecer por ésa mano amiga,ésa voz de ánimo y esperanza que me distes. Té quiero querido hermano una parte de mí sé va contigo, te extrañaré por siempre hasta pronto, descansa en paz tú hermano que te ama Carlos A. Ortiz