Martinez, Guillermo's Obituary
Guillermo Martínez Campos, 107 años, vivió en Miramar, Florida, murió el 4 de Febrero, 2025.
Guillermo nació el 25 de Junio de 1917 el tercer hijo de Filomena Campos Cabeza y Pablo Martínez Martínez en el pueblo de Roque, municipio de Perico, provincia de Matanzas, Cuba. Estudio hasta el quinto grado y su poca educación académica no influenció ni afectó su alto grado de inteligencia y sabiduría combinada con un carisma de alto intelecto. Guillermo continuó estudiando por si mismo mediante libros de interés. El fue músico por afición, poeta por inspiración y justo por convicción. Sus principios morales no tenían equivalentes. Su carácter valiente y correcto fue el ejemplo de todos los que lo conocieron. Su esposa Adelina Sánchez Gonzáles aun después de 64 años de casados lo amaba más que a nadie. El fue un hijo, hermano, esposo, padre, abuelo y amigo ejemplar. Todo lo que tuvo lo dio con amor a los demás sin guardarse nada. Daba de lo que no tenía y el amor que se recibía de el sobraba. Nunca hubo duda en ninguno de nosotros que podíamos confiar y depender de él en cualquier momento, lugar y ocasión. El fue incondicional para todos sus amigos y familia.
Guillermo trabajo en los hornos del Central España en temperaturas de extremo calor de 11 AM a 7:00 PM por 37 años y durante ese tiempo también trabajaba en las canteras sacando cantos de 5:00AM a 10:00AM para mantener a sus hijos y nietos. Nunca se quejo de su trabajo aunque tenía varias hernias en la espalda, lo hacia con alegría.
Guillermo llegó a este maravilloso país el 28 de Diciembre de 1989 y se hizo ciudadano Americano el 28 de Enero de 2011. Siendo para él uno de los días mas felices de su vida. Aunque en su cuenta de banco no había dinero, el fue un hombre verdaderamente rico y afortunado. Le sobraba el amor, el respeto y la admiración de su familia y de todos los que lo conocían. Aún los más difíciles de carácter lo querían. El era el abuelo de todos: jóvenes, medios tiempos, y ya mayores. Vivió una vida plena. El fue muy feliz jugando dominó, pescando y paseando por todas partes con su hijo menor y su nieto. Sus concejos vivirán para siempre en nuestra memoria: “Se muy positivo, la verdad siempre ofende, no guardes ningún rencor, y ayuda a todo el mundo”. El tuvo la gran bendición de hacer feliz a los demás y de también ser muy feliz. Vivió una vida bien vivida. Murió rodeado de todos sus seres queridos, en su cuarto y en su cama, donde el deseaba morir. Le sobreviven sus cuatro hijos biológicos y sus otros hijos del alma: Nerma Martínez, Miriam Martínez, Marcelo Martínez, Silvio Martínez, Magaly Castro, Silvio A. Martínez, Rachelly Martínez, Tiffany M. Martínez, Kaitlyn Martinez y sus otros muchos nietos, bisnietos y tataranietas.
“Veterano, Gracias por enseñarnos el valor de la familia.
Tu legado de bondad y generosidad nunca será olvidado.”
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